Las inundaciones perjudican a los cementerios en la zona.
Las constantes lluvias registradas en el norte de Perú desde principios de marzo han generado numerosas inundaciones y emergencias, que afectan algunas ciudades de la región, y además a los cementerios.
En las ciudades de Talará y Túcume, de las provincias de Piura y Chiclayo respectivamente, se denunció que las inundaciones han causado daños en varios cementerios, resultando en ataúdes y restos óseos que salen a flote.
Según las autoridades locales, la acumulación de agua no ha podido ser drenada por cuenta del mal tiempo y asuntos logísticos, lo que ha generado aún más daños dado que algunas de las construcciones tienen más de 100 años y las lluvias las han destruido o dejado sin reparación.
El alcalde de Túcume, Tomás Sandoval Baldera, reveló que las aguas no podían drenarse rápidamente por que están contaminadas y el proceso implicaría lanzar el agua a zonas cercanas, perjudicando las cosechas y el ganado que se encuentra en la región.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología, confirmó que las lluvias con nieve y granizo continuarán especialmente en el centro y norte del país.