Las llevaban a España con falsas promesas de trabajo.
En una operación contra la trata de personas, la Policía española liberó a siete mujeres colombianas quienes eran obligadas a ejercer la prostitución en una vivienda situada en la localidad de Sabadell, en la provincia de Barcelona, en el noroeste de España.
En el mismo sentido, las autoridades detuvieron a cinco sospechosos que se dedicaban a la explotación sexual de las mujeres, al tráfico de drogas y al blanqueo de capitales.
Abundante material documental e informático fue incautado en el registro de dos inmuebles, incluyendo libretas de contabilidad y agendas relacionadas con la actividad delictiva.
Las víctimas fueron captadas en Colombia con la promesa falsa de empleo como cocineras en España. Una vez en territorio español, eran llevadas a una cocina clandestina donde eran encerradas en un sótano con llave. Allí eran explotadas sexualmente todo el día y controladas a través de cámaras de seguridad en una vivienda vigilada.
Las mujeres eran obligadas a consumir drogas, mantener relaciones sexuales incluso si estaban enfermas y, en ocasiones, sufrían golpes y agresiones por parte de los clientes.
De los cinco detenidos, acusados de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, blanqueo de capitales y delitos contra la salud pública por tráfico de drogas, dos han ingresado en prisión preventiva y tres han quedado en libertad con cargos.
En Colombia, una organización las captaba y bajo la falsa promesa de emplearlas como cocineras en España, las llevaban con engaños, les ofrecían un sueldo de 33 euros al día, alojamiento y comida, pero en realidad eran obligadas a trabajar en una cocina clandestina en Sabadell, donde eran vigiladas constantemente mediante cámaras de seguridad.